En vísperas de la Semana Mayor, los pasillos del Colegio Cajamag en Santa Marta se llenaron de espiritualidad, emoción y gratitud con la visita especial del obispo de la Diócesis de Santa Marta, Monseñor José Mario Bacci Trespalacios. La jornada, cargada de simbolismo y cercanía, fue una valiosa oportunidad para que la comunidad educativa se conectara con un mensaje de fe y esperanza en medio del calendario académico.

Desde tempranas horas de la mañana, Monseñor Bacci fue recibido con entusiasmo por directivos, docentes y estudiantes. Recorrió cada rincón del colegio, saludando con calidez a los niños y jóvenes, y rociando con agua bendita las instalaciones como símbolo de protección y bendición divina.

Uno de los momentos más significativos fue cuando el obispo se dirigió en altavoz a toda la comunidad escolar. Con palabras cargadas de amor, envió un mensaje de reflexión espiritual que tocó los corazones de muchos. “Aquí se construye la nueva generación. Es importante que lleven a Dios en sus corazones y que crezcan, además de la formación académica, con valores y sean personas de bien”, expresó el prelado.

El obispo no solo habló de espiritualidad, también valoró el trabajo educativo que se desarrolla en la institución. Felicitó a las directivas de Cajamag y al cuerpo docente por el compromiso con la formación integral de los niños y jóvenes, y destacó la misión social del colegio, que abre sus puertas como institución privada a los hijos de trabajadores de bajos ingresos. “Es un colegio que cumple muy bien su tarea y eso se ve reflejado en sus estudiantes”, señaló con admiración.

La directora del Colegio Cajamag, Maribel Alarcón, agradeció profundamente la visita de Monseñor y resaltó lo significativo que fue para la comunidad educativa. “Ha sido recibido con mucha gratitud y emoción por nuestros docentes y estudiantes. Esta mañana fue distinta, especial y muy cercana a Dios”, manifestó conmovida.

Los estudiantes, por su parte, no ocultaron su alegría. Muchos se acercaron a saludar, abrazar y compartir con la autoridad eclesiástica, dejando ver que el mensaje del obispo caló en sus corazones.

La calidez del encuentro reflejó que la fe sigue viva en los espacios escolares, especialmente en un lugar como el Colegio Cajamag, donde se promueve el acercamiento a los principios cristianos como parte esencial de la formación integral.
En estos tiempos donde la sociedad enfrenta múltiples problemas, espacios como este se convierten en una pausa necesaria para sembrar en los más jóvenes valores como el amor, la solidaridad, el respeto y la esperanza.